– Coloca la salsa verde, la crema mexicana y el cilantro en una licuadora, procesa hasta que tengas una salsa muy cremosa.
– Calienta en una sartén a fuego medio, el aceite y sumerja las tortillas de una en una en el aceite para ablandarlas, dándole solo unos segundos por cada lado. Además de suavizarlas para facilitar enrollarlas, otra de las razones por las que hacemos esto es evitar que las tortillas se rompan. Yo prefiero usar una brochita de cocina para barnizar con aceite las tortillas y luego calentarlas en una sartén para usar menos aceite. Transfiéralas a un plato cubierto con toallas de papel para drenar el exceso de aceite. Precalienta el horno a 350 ° F.
– Sazona el pollo con sal y pimienta. También puedes agregar ajo en polvo si lo deseas.
– Divida el pollo desmenuzado en partes iguales entre las tortillas, enrolla y coloca las enchiladas en 1 sola capa, con la orilla de la tortilla hacia abajo.
– Cubra con el resto de la salsa; espolvorea con queso. Hornea por 30 minutos o hasta que el queso comience a derretirse y y comience a dorarse. Sirva inmediatamente