– Ajusta la rejilla del horno a la posición central y caliente el horno a 200 C grados; prepara una bandeja de hornear grande con papel especial para hornear.
– Cocina el chorizo en un sartén ya caliente y sin sin aceite. El chorizo solatara su propia grasa cuando se cocina, se cocinará en unos 7-8 minutos; retíralo del fuego y deja enfriar.
– Una vez que el chorizo se haya enfriado, mézclalo en un tazón con el Queso rallado y colócalo en el refrigerador para mantenerlo frío hasta que esté listo para usar.
– Espolvorea ligeramente su mesa o área de trabajo con harina y extiende una hoja de la masa hojaldre. Con un rodillo enharinado, estira ligeramente la masa hasta formar un cuadro de unas 10 x 10 pulgadas. Trata de no poner demasiada presión sobre la masa.
– Con la ayuda de un cortador de pizza o un cuchillo, corta la masa en 4 cuadros. Barniza los bordes/orillas de los cuadros con el lavado de huevo, con la ayuda de una brochita de cocina; coloca 2 cucharadas de la mezcla de queso y chorizo en el centro de cada cuadro. Dobla la esquina para encontrar la esquina opuesta para formar un triángulo. Barniza la parte superior dos veces con el lavado de huevo, asegúrate de que la mezcla de huevo no toque los bordes exteriores de la masa; Esto es importante para que los bordes se expandan y se vuelven muy esponjosos, como en las imágenes de abajo.
– Hornea durante 18-20 minutos hasta dorar, girando la charola una vez para tener un patrón uniforme. Si deseas que sus volovanes sean realmente crujientes, apaga el horno y deje que se enfríen con la puerta del horno ligeramente abierta.